Hoy
he decidido que tengo mucho tiempo libre.
Mis
círculos más cercanos son capaces de corroborar que no hace mucho
que mi mente tiene más sarpullidos de lo normal, que pienso menos
las cosas y que, sobre las cosas que menos pienso, pienso más.
Así
que he decidido abrir un espacio tan egocéntrico como me sea posible
para publicar esos sarpullidos y deleitaros con mis movidas. No os
van a servir en vuestra vida ni os van a descubrir nada nuevo (salvo
que, tal vez, estáis tan mataos como yo), ni siquiera os van a hacer
sentir mejor con vuestras patéticas andaduras por este valle de
lágrimas.
Pero,
para los que deseen suicidar su intelecto durante unos minutos,
descubrirán dos tipos de movidas:
- Movidas de pequeño: Todos hemos tenido confusiones, conceptos mezclados y equívocos, malentendidos frutos de la inocencia y yo no soy ninguna excepción. Aquí rememoro las chorradas que pasaban por mi mente cuando era un moco.
- Movidas actuales: Básicamente, la que voy soltando día a día, cuando me salga de los *cojines.
Espero que gocéis, aunque advierto que no va a dar para paja. Lo siento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario